La película con Bill Skarsgård y FKA Twigs ha recibido críticas negativas por no cumplir con las expectativas que dejó la original del año 1994, lo que ha resultado en un fracaso en taquilla.
El pasado 22 de agosto se estrenó The Crow (o El Cuervo), película dirigida por Rupert Sanders y protagonizada por Bill Skarsgård. El filme trata sobre Eric Draven, un músico que, tras ser brutalmente asesinado junto a su novia Shelly (FKA Twigs), regresa de la muerte y reencarna en un cuervo sobrenatural para vengar ambos asesinatos.
A pesar de tener un elenco destacado y un presupuesto de $50 millones, la película no ha encantado al público y su recibimiento ha tenido en su mayoría opiniones negativas. Según el sitio web de críticas y reseñas Rotten Tomatoes, The Crow recibió un 21% de 100, mientras que en Letterboxd, red social para calificar y escribir sobre cine, tiene una puntuación de 2.3 de 5.
La cinta es un remake de una con el mismo nombre y trama, realizada en el año 1994 con Brandon Lee como protagonista, hijo del artista marcial y también actor Bruce Lee.
Recepción negativa
Según una reseña escrita por el crítico de cine Brandon Yu para el New York Times señala que la imagen del protagonista “no se deriva ni de la película original ni del cómic, sino de una versión de la conciencia alternativa al estilo de Hot Topic” (una marca de ropa adolescente). También agrega que “en esta nueva versión, han desenterrado [la película] para ponerle un disfraz de Halloween”.
Las principales críticas dirigidas a El Cuervo giran en torno a la falta de química entre los actores, el intento de modernizar una historia poderosa sin ofrecer una nueva perspectiva, y la percepción de que la película es una simple “reproducción sin alma” del clásico, con pocos elementos a destacar.
Comparación con la película original
En mayo de 1994 se estrenó The Crow, película basada en la serie de cómics de James O’Barr. Dirigida por Alex Proyas y protagonizada por Brandon Lee, la cinta atrajo gran notoriedad incluso antes de su estreno, debido a la muerte accidental de Lee durante el rodaje a manos del actor Michael Massee. Aunque inicialmente se pensó en cancelar el proyecto, el director decidió continuar, utilizando un doble en las escenas oscuras y efectos especiales CGI para completar el film.
A pesar de la desgracia, la película fue bien recibida por la crítica y logró recaudar casi seis veces su presupuesto. Su innovadora estética visual y su fiel adaptación al cómic contribuyeron a que, con los años, se convirtiera en un clásico de culto.
Aunque la trama de ambas películas guarda similitudes, la nueva versión de El Cuervo no logró conectar con el espectador, resultando en una decepción cinematográfica. Andrés Monsalve, publicista y escritor en el medio Mundo Películas, relata que el fracaso de la cinta es multifactorial, debido a que no cumple con lo que se esperaba de esta historia trágica, tanto de la trama como de lo que ocurrió con el actor.
Monsalve añade que, debido al mal resultado de esta versión, “hay un relato que probablemente murió con Brandon Lee, esta historia de dolor y pérdida se termina manifestando en la vida real”.